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ANTES (Fuente de las fotografías: www.vitoriaayeryhoy.blogspot.com - Hilario G.T.) AHORA
Esta calle, primeramente llamada de las Cercas Altas, debido a que en ella se encontraban las segundas murallas de la ciudad, ha tenido distinta longitud, porque bien se entendía que comenzaba en la plaza de la Virgen Blanca, o en la de la Provincia, lo mismo que tanto finalizaba más aquí o más allá.
Actualmente comienza en la Plaza de la Provincia y termina en el Portal de Arriaga, absorbiendo en su última parte lo que fue Campo de los Sogueros. El nombre que hoy ostenta lo recibió el año 1921.
Recibió el nombre como homenaje a la memoria de tan insigne vitoriana; la M. María-Josefa Sancho de Guerra, fundadora del Instituto de las Siervas de Jesús, cuya residencia se encuentra en la misma calle. "Hija predilecta de la Ciudad", nació en la calle de la Herrería el 7 de septiembre de 1848, en la casa donde después las religiosas de dicho Instituto instalaron un oratorio y habilitaron posteriormente en su planta baja un Dispensario. Con su nombre se distingue también uno de los Colegios Nacionales construidos en Abechuco y cuya lápida nominativa fue descubierta, pocos meses después de entrar en funcionamiento, en junio de 1971, coincidiendo con el centenario del Instituto por ella fundado.
Fue la residencia de Vitoria una de las primeras casas establecidas. Lo hizo el año 1880 al final de la calle Correría para trasladarse en 1895 al edificio actual, construido conforme a los planos del arquitecto municipal, don Fausto Iñiguez de Betolaza. Se inauguró en 1896.
Anteriormente esta calle perteneció a la que en 1820 se llamó de la Constitución -nombre que volvió a ostentar desde el 14 de julio de 1931 al 26 de agosto de 1936-, y en 1824 de las Huertas.
Las Siervas de Jesús han construido un edificio, destinado a Residencia de personas mayores -pronto también para colegio apostólico-, en la carretera de Berrosteguieta. Fue inaugurado el 10 de julio último.
Con el fin de ensanchar la calle junto a la iglesia de San Pedro el año 1854 fue derribada alguna casa que existía junto a ella. En parte de la edificación de dicho templo todavía puede advertirse algún resto de las antiguas murallas.
En algunas ocasiones se ha comenzado a distinguir la calle por su lado derecho enfrente de su comienzo en esquina por el otro lado, de manera que se confundía con las casas de la Plaza de la Provincia en la esquina con la calle de Don Pedro Egaña.
En la actualidad se halla previsto el derribo de la casa parroquial de San Pedro, inmediata a la cual acaba de quedar abierto un pasadizo que, a la par que comunica con la calle de la Herrería, permite que pueda verse la portada norte de dicha iglesia, frente al edificio que acaba de ser construido con el nombre de "Don Diego". En él se recuerda a los distintos personajes que en siglos pasados llevaron tal nombre. Como algunos de los Álava, que son recordados en las artísticas sepulturas que se hallan en la citada iglesia. El referido edificio ha sido levantado sobre el solar de algunas anteriores edificaciones, y principalmente el que tuvo asentado el Colegio "Niño Jesús", de las Carmelitas de la Caridad, trasladado a las calles del Beato Tomás de Zumárraga y del Gorbea. Había quedado establecido en 1870, ocupando primitivamente la parte contigua, con fachada a la calle de la Herrería.
El último edificio en el segundo tramo de la calle corresponde a la fachada lateral del edificio denominado "Torre de doña Ochanda".
Al otro lado de la calle, en la casa en que ésta se inicia, tuvo su primer establecimiento la fábrica de chocolates de Ezquerra. Otra de la misma especialidad hubo en la casa que en su tiempo estaba señalada con el número 29, y era la derribada en la esquina con la plaza de Aldave. Pertenecía
a Joaquín-María Levario.
Más o menos frente a San Pedro tuvo su fábrica de carruajes Tomás Montoya, desde 1840. Llegó a tener más de un centenar de operarios.
Cuando falleció su titular continuó por algún tiempo al frente de a industria su esposa, Paula Retana.
En la misma calle hubo otro taller de carruajes, Tomás Lafuente, de nombradía nacional.
En el piso segundo izquierda de la casa número 1, vivía Eliodoro Ramírez Olano, que pertenecía a una familia de Elciego. Fue secretario y exdiuntado provincial y falleció en la mencionada casa el 4 de febrero de 1909.
En el número 3 -que, derribada, se reconstruye- habitó hasta su fallecimiento en 1958 don Jesús María de Vírgala, notable organista, que lo fue de la catedral de Santa María. Autor del himno a la Virgen de Estíbaliz.
En la inmediata siguiente residía la familia Perea, cuyo estudio fotográfico fue muy popular, especialmente frecuentado por el sexo femenino.
En el piso primero estuvo durante algún tiempo el Círculo jaimista, y después, el nacionalista. Así como la Asociación de Inquilinos.
En la misma casa se estableció, al ser fundada, la Institución "Betania", para señoras y señoritas solas; trasladada luego al final de la misma vecindad, al otro lado, y luego, a sus espaldas, en la calle de la Herrería.
En el número 9 se encontraba la Asociación Misionera Seglar. En la misma casa vivió y falleció Federico Baraibar, alcalde, catedrático y literato e historiador. Con motivo del recuerdo que le fue dedicado al ser conmemorado el año 1951 el centenario de su nacimiento, fue colocada una lápida conmemorativa.
En la casa siguiente conocimos la imprenta "Nueva Editorial", que regentaba Aniceto Viguri.
En el número 19 antecedió al actual establecimiento la fábrica de cepillos y fuelles y la cepillería de Ezequiel Monte, antes, Vicente Monte, sucesor de Escoriaza, donde antes había estado el taller de fundición y grifería de Narciso Fano, al que se unió Isidro del Amo, quien lo trasladó luego a la Plaza de la Provincia. Tuvo fábrica de fuelles Manuel Lejarreta.
También estuvo en sus primeros tiempos el taller de muebles de Antonio Bonilla. Otro popular taller, de cerrajería, estuvo en el número 23: el de Isidro Corta -concejal que fue del Ayuntamiento-, cuyos hijos trasladaron a la calle del Beato Zumárraga el taller, ya hace unos años desaparecido.
Uno de los establecimientos más populares en esta zona fue el garaie de bicicletas "El Pedal", que llevaba buen número de años.
Inmediatamente había en los últimos años una pescadería y una peluquería, recientemente desaparecidas, al ser derribadas las antiguas construcciones para ser levantadas
las que les han sustituido.
Al comenzar el siguiente tramo de la calle, y para unir la casa de los Verástegui con el jardín que tenían donde ahora los titulados del Marqués de Ja Alameda, existió hasta hace no muchos años un característico puente, construido en 1830. Fue derribado el 31 de marzo de 1964.
Después de las nuevas edificaciones que completan el lado izquierdo de la calle, a su final se hallaba la que fue casa de Echánove. derribada en 1954, y que había servido para muy distintos destinos. Al fundarse el 20 de abril de 1866, estuvo el Ateneo Vitoriano, que luego pasó a la calle Postas.
En 1907 se estableció el colegio "Santa Bárbara", para huérfanos del arma de artillería, que permaneció hasta 1910. En el mismo edificio se albergaron la Zona de Reclutamiento la Academia de sargentos, la Comisaría de Guerra, el Parque de Artillería y la Intervención de Ingenieros, así como una Sala de Esgrima y Salón de Corte. A fines del siglo XIX estuvieron las escuelas municipales de Justo Montoya. También funcionó el Círculo Filarmónico.
Desde 1935 a 1954 estuvo en la primera planta la Audiencia Provincial, cuya sala de vistas se encontraba en Ja inferior, así como el Juzgado Municipal y Registro Civil. Se habían trasladado desde los locales que ocuparan en la parte posterior del Instituto, en "La Florida", desde 1884. Luego fueron a ocupar los actuales locales en Olaguíbel.
Los juicios de mayor expectación celebrados en la sala de la Audiencia mientras permaneció en esta calle fueron el del año 1935 por el crimen de "La fuente de la pared" y los que se vieron por los múltiples asesinatos cometidos en Respaldiza y Añes, que motivaron las últimas ejecuciones llevadas a cabo en Vitoria. El último juicio se celebró el 30 de octubre de 1954, y en él tuvo que responder el procesado del hurto de un traje en la desaparecida "Fonda Vitoria".
En la esquina de enfrente fue popular la tienda de comidas y bebidas de Telmo lbargoitia, pariente de Quintina Escoriaza, por cuyo nombre fue conocida la casa, ahora distinguida por "Torre de doña Ochanda", después de la restauración efectuada por la Caja de Ahorros Municipal, culminada el año 1971.
El resto de la calle, hasta su final, se llamó "Campo de los sogueros" desde 1855, debido a que en dicho lugar, a su izquierda, se encontraba el que utilizaban los dedicados a la actividad de hacer sogas. Trasladados, al tener que abandonar este sitio para las nuevas construcciones, al comienzo del viejo camino de Santa Isabel. A principio del siglo pasado también estuvieron en la actual plazuela de Santo Domingo; y algún tiempo, en la plaza del Machete.
Las primeras 500 viviendas, entre el Campo de los sogueros y la calle de Aldave, fueron autorizadas para su construcción el 24 de octubre de 1945. Posteriormente se hizo cesión de terrenos en dicho Campo, para completar la manzana de casas.
En la casa inmediata siguiente al lugar donde se encuentra el convento de las Siervas de Jesús, cerca de la bajada al antiguo camino de Ali, donde luego estuvo la fundición de Corta, estuvo establecida la imprenta de Fermín Herrán, en la que, en 1887, se publicaba el periódico semanal "El Danzarín". En los mismos talleres, que también daban al número 32 de las Cercas Bajas, se editó "La Ilustración de Álava".
(Fuente del texto: Venancio del Val)
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